Hoy encontramos a Carlos Fabián Leeb o simplemente el “Gato”, trabajando en Irán. Ese personaje increíble que nos hizo enrojecer las gargantas tantas veces para más tarde sentarse en el banco de suplentes del Taladro, nos cuenta como es su actualidad laboral a orillas del Golfo Pérsico.\n\nPor Rodolfo Morel\n\n
Hola “Gato”, no sabíamos que estabas tan lejos…\nSalam (hola) amigos de Banfield, no estoy tan lejos, me vine para Irán (risas). Estoy a 100 metros del Golfo Pérsico y a 20 minutos Dubai, un paraíso increíble.\n\n
¿Qué estás haciendo?\nEstoy dirigiendo al Shahrdari F.C. de la ciudad de Bandar Abbas.\n\n
¿Cómo llegaste ahí?\nMe trajeron Fabio Jurdakis (agente FIFA) que vive en Banfield y Majid (agente FIFA iraní). Salió todo muy rápido porque había renunciado a la conducción de Universitario de Sucre (Bolivia), luego de clasificar para la Copa Sudamericana, estuve con mi familia apenas una semana, armé las valijas y me vine para acá.\n
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¿Cuánto tiempo hace que estás?\nLlevo un casi un mes, recién terminamos la pretemporada en Teherán, más o menos a 2 horas de Bandar Abbas. El torneo empieza en 2 semanas.\n\n
¿Cómo se conforma tu cuerpo técnico?\nEl cuerpo técnico se completa con Walter Aguilar como ayudante de campo, mi hermano Paulo Leeb, que es el entrenador de arqueros y el profe Sergio Carossino. Además tenemos un traductor porque sino nos volvemos locos.\n\n
Hace poco que estás ¿Cómo es la vida en Irán y que es lo que más te impresionó?\nLa vida está 100% unida a la religión, cero alcohol, cero boliches, cero joda. Me sorprendió mucho lo afectuosa que fue la gente con nosotros y los dirigentes que son muy exigentes, estamos a prueba todo el tiempo. Otra cosa rara es que no se puede andar con pantalones cortos, salvo dentro de las casas y en los entrenamientos.\n\n
¿Cómo es el fútbol en Irán?\nEs duro, fuerte y se juega bien. Está en crecimiento, hay jugadores de todo el mundo y de muy buen nivel.\n\n
¿Que es lo que más recordás de Banfield y que es lo que más se extraña?\nRecuerdos tengo muchos y muy lindos: haber trabajado con Luis Garisto, el ascenso a primera, haber conocido al gordo “Garrafa” Sanchez, Falcioni, el afecto de Duhalde, el Checho, Otero, De Felippe, Clide Díaz, Marcelo Galván, el utilero, todos los que trabajan en el Predio y en la Sede, el comisario Rodriguez, “Pico” Hernandez, José del Predio. A Portell también lo tengo que nombrar, como a Tempone y a Grigera.\nBanfield me dio la oportunidad como técnico y ese fue el comienzo de mi carrera. Tuve jugadores importantes como Dátolo, Palacio, Paletta, los Civelli, Lucchetti, Bologna, Sardella, Cvitanich, Leiva, Santillo, Maidana, García, Schmidt, Salvatierra, Bilos, el “Archu”, Laso, Galarza, el “Cebolla” o Armenteros. Tengo muchos recuerdos buenos de la gente, de la hinchada y los momentos feos me los guardo, pero obvio que no los olvido. Así aprendo a no cometer algunos errores que me perjudicaron y mucho, asumo mis responsabilidades y me critico mucho para crecer.\n\n
A la gente de Banfield que le querés decir…\n¿A la gente? Que otra cosa les puedo decir que no sean palabras de agradecimiento. Desde todos los puntos de vistas posibles: desde los afectivos, porque nadie puede decir que no le gusta ser querido y yo me siento muy querido, hasta me animo a decir que demasiado querido, comparándolo con lo que di y me brinde con toda mi alma y mi corazón. También tuve criticas, que me hicieron corregir constantemente para crecer como persona y como profesional.\nLes mando a todos los Banfileños un abrazo grande de un amigo que nunca dejará de amar al Club que le dio la oportunidad de vestir sus colores y le abrió las puertas como director técnico (soy un enfermo de esta profesión, un loco, pero buen tipo y buen profesional y lo expreso con toda humildad). La gente de Banfield siempre estará sufriendo o festejando algo, sin otros intereses que no sean ver ganar a su amado equipo. Los dirigentes, directores técnicos o jugadores están de paso (hay excepciones como “Garrafa” o el cuerpo técnico de Falcioni) y no hay quien pueda decir lo contrario.