viernes, 06 de mayo de 2016 - 00:22

“La ausencia se llena con la sensación de que se hizo justicia”

(Inforegión). Con estas palabras recordó Gonzalo Bugatto a su hermano Lautaro, el joven asesinado en 2012 cuando salía de su casa en un caso de gatillo fácil.


132370_1 copiaHoy se cumplen cuatro años de la muerte de Lautaro Bugatto y su hermano Gonzalo lo recuerda y expresa su tranquilidad por sentir “que se hizo justicia”.

Es que por el crimen, el policía David Benítez fue condenado a 14 años de prisión y actualmente se encuentra cumpliendo la pena. Motivo por el cual, según expresa Gonzalo, es una “forma de llenar ausencias”.

“El dolor de la ausencia se llena con otras cosas, con amor por ejemplo. También con recuerdos, cuando en la mesa familiar nos acordamos de anécdotas y nos reímos, o cuando vemos a la hija de él que va a cumplir seis años este mes y es verdaderamente idéntica tanto en rasgos físicos como en personalidad. Todo nos recuerda a él”, señaló.

En ese marco, resaltó que aprendió “a valorar los pequeños detalles” porque “uno no elije las cosas que le pasan, si elije cómo afrontarlo y con qué herramientas”.

“La ausencia se llena con amor y con la sensación también de que se hizo justicia. Uno muchas veces escucha que las personas dicen que los familiares descansan en paz cuando se hace justicia y es así, no es una frase trillada. Es como una reivindicación social que reconoce su inocencia y su injusticia en un determinado hecho”, evaluó.

En ese marco y puntualmente sobre la reivindicación desde el plano judicial, agregó: “Uno lucha por la justicia, y también por el reconocimiento de quien no está. Haber conseguido una instancia judicial favorable nos hace sentir satisfechos, en el sentido de la reivindicación simbólica y el acto reparador de la Justicia".

El caso. Lautaro Bugatto tenía 20 años, era futbolista de las divisiones inferiores de Banfield y jugaba en Tristán Suárez a préstamo. Tenía una hija de 2 años cuando fue asesinado el 6 de mayo de 2012. Benítez le disparó por la espalda, excusándose en un tiroteo con delincuentes, que fue desmentido por los testigos del hecho. El asesino fue condenado a 14 años de prisión.