“Dejando el alma por nuestra pasión”

“Trato de hacer reír a la gente”. De esta manera se presenta Mariano Fidalgo, un hincha de Banfield que tal vez te hayas cruzado en la tribuna miles de veces. Mariano es actor, y reconoce que “por la necesidad de trabajar fue que empecé a hacer papeles como extra para agencias de publicidad”. En los últimos tiempos se ha desempeñado en una compañía independiente en donde, entre otras, realizó obras de Shakespeare.

Tiene 26 años, estudió en el ENAM y actualmente vive en Temperley. “El escudo verde y blanco fue en principio una herencia que rápidamente se convirtió en una elección, y se me hizo carne para siempre”, dice Mariano, emocionado. “Los profesores y el clima que se respiraba en la escuela estatal influyeron en gran medida con mi manera de pensar: El Taladro, la actuación, la familia y los amigos siempre fueron mis pilares claves”, confiesa. Al hablar con él, se aprecia que ama y entiende de teatro. También le gusta dibujar y tocar la guitarra.

Contános como empezaste con la actuación.

Había hecho algo de teatro cuando era chico, era un ámbito en donde me desenvolvía con total libertad, pero lo tomaba como un hobbie. Sin embargo, y raíz de la necesidad de trabajar fue que empecé a hacer papeles como extra para agencias de publicidad y me afilié al sindicato (de actores). Ahí pude observar de cerca el trabajo del actor y me sirvió mucho para comprender que no se trataba solo de un juego o de recitar un parlamento, sino que estaba frente una profesión, una ocupación que requería de un conocimiento especializado, organización propia y autorregulación como cualquier otra. Fue así como me decidí a estudiar la carrera de Actuación y comencé a trabajar, con la sensación de haber encontrado mi lugar. El teatro no solo me brinda satisfacción, a su vez fortalece la cultura, y sana el corazón de muchas personas de esta sociedad.

¿A que géneros o estilos te dedicas?

Generalmente trato de hacer reír ala gente. La alienación es la enfermedad de hoy en día por las condiciones en que vivimos, y el objetivo de las funciones es distender al espectador, poder sacarle una carcajada. La comedia, el sainete y la farsa, son sin duda los platos fuertes para el público de hoy en día porque generan un ambiente de libertad, en donde se puede criticar libremente al sistema sin tener que estar reparando en modales a la hora de hablar.

La tragedia en cambio no es un género para cualquier audiencia, ya que requiere de un público preparado. De todas maneras prefiero no encasillarme en ningún estilo, pueden ser grotescos, absurdos o naturalistas los personajes, eso varía dependiendo de la ocasión y lo que se quiera mostrar. Me gusta exponer realidades sin juicio de valor, y aprecio que la gente saque sus propias conclusiones.
¿Donde estas actuando actualmente?

Junto con el elenco de la Escuela Municipal de Lomas, estoy preparando un personaje para la obra “El cuarto en que vivimos” de Graham Greene con fecha de estreno a confirmar.

¿Si te pregunto “Banfield y el arte”, que me decís?

Banfield es parte de nuestra cultura, es un club en donde nacen ideas y se practican todo tipo de actividades humanas. Es el lugar que elegimos los hinchas para vivir las más intensas emociones, uniéndonos en rituales mágicos y dejando el alma por nuestra pasión. Es una obra de arte que trasciende los tiempos, que supo ser potrero de Garrafa Sanchez, y cuna de Julio Cortázar.

 

Por Hernán Bañez