“Mirada hacia adelante, hondo sentir. Buscando esa libertad que sólo se encuentra transitando la ruta de la vida”. Esta es la declaración de independencia de la patria más chica de América Latina: La Paloma. Una patria móvil, aventurera, de espíritu sanmartiniano.
En rigor de verdad, La Paloma es un Dodge 1500 tripulado por 3 lomenses, dos de ellos hinchas de Banfield, que decidieron en diciembre de 2010 salir a recorrer el más maravilloso, mágico y misterioso continente del planeta: América. Estos 3 tripulantes son Pablo Cavallero, Ariel Sibikowski y Federico De Paola, pintor, actor, y docente de lástica, con quien realizamos esta entrevista vía Skype.
La travesía titulada “América en Paloma” arrancó en Banfield y tiene por destino unir el continente americano en dos años, llegando a Alaska, pero deteniéndose en cada punto donde sea posible para impregnarse de la cultura del lugar. Hoy, La Paloma está en Ecuador, y ya pasaron por el litoral y noroeste argentino, Bolivia y Perú.
Como bitácora de viaje, el equipo de La Paloma actualiza (siempre que la geografía del viaje les permita acceso a la red de redes) un blog, americaenpaloma.blogspot.com, donde se pueden ver los relatos de lo vivido y pro sobre todo, un excelente material fotográfico de los lugares visitados. En este relato visual, se aprecia la belleza de nuestro continente y la aventura que encaran Chuno, el Mudo y Fede día a día. Es sano envidiar esa experiencia no tan ajena, compartir como se suman (y se bajan) amigos en parte del viaje, y las personas que van conociendo. Lugares, comidas, noches, juegos: Un perfecto idilio aventurero.
¿Como está compuesto el equipo de La Paloma?
El equipo esta compuesto por tres amigos. Chuno: (Pablo Cavallero) de 29 años y conductor principal de La Paloma. Hincha fanático de Banfield, de alma aventurera y viajera. El Mudo, también conocido como Ariel Sibikowski, de 27 años, y también hincha de Banfield. A buen entendedor pocas palabras. Por último estoy yo, Fede (De Paola) con 33 años recién cumplidos, hincha de Temperley. Soy el artista del equipo y el más goloso de los tres (se rie).
¿Como surgió la idea de hacer este viaje? ¿¡Y en un Dodge 1500!!?
Lo del auto no te lo vamos a contestar porque se cae de maduro. Es un noble fierro. Las ganas de viajar siempre estuvieron latentes. El objetivo es buscar algo más, escaparle a la rutina diaria y hacer lo que todo el mundo tiene ganas de hacer: Dejar todo para ganar más, “con una decisión basta”. La Paloma ya era de Chuno hacia un año más o menos, asique ya tenemos antecedentes de que el Dodge nunca nos va a dejar a gamba.
Imagino que habrán planificado el tema de los repuestos y los víveres…
Con un poco de asesoramiento de amigos y de familiares mecánicos, llevamos unos pocos repuestos en el baúl, los más importantes, y dependiendo de la confianza de la Paloma seguimos ruta. Vivimos el día a día.
¿Que paisaje o momento destacarías de lo que ya recorrieron?
¡¡Uf!! ¿Como poder diferenciar un momento particular entre tantos buenos en un viaje de este calibre?. Ya estando en Cuenca, Ecuador, después de casi siete meses, te podemos decir que anduvimos por paisajes increíbles. De ver un atardecer de Luna en el Valle sagrado del Machu Picchu, de dormir con lagartijas a metros del mar pacífico en Máncora Perù, de ver una cantidad infinita de estrellas fugaces en Concepción del Uruguay Entre Rios, de estar envueltos en una nube sin ver nada a 4500 mts de altura en una cuesta de Bilcabamba en Ecuador y de bañarnos en un volcán con el agua a una temperatura de 30 grados en Potosì Bolivia. Pero lo más importante de todo es la gente, las culturas, las diferentes costumbres que te hacen adaptarte a cualquier cosa.
Una anécdota que nos acordamos fue llegando a La Paz, dijimos “dejemos La Paloma en el alto de La Paz así no nos metemos en la ola de la ciudad porque si no no salimos más”. Sólo bastó decirlo para que agarremos una autopista que nos llevo directo al corazón de la ciudad. El problema más grabe es que La Paz además de estar lleno de combis, bocinas y mucha gente hay calles de montañas, y para que la Paloma trepe, necesita un envión de por lo menos cuadra y media, asique el show fue que el Mudo y yo tuvimos que cortar la calle para que La Paloma venga embalada cortando bulones y pueda subir. Fue toda una odisea pero pudimos salir de la “Olla”.
Contanos acerca de tu trayectoria en el arte…
Arranqué con ganas de dibujar a los 12 años cuando mi madre me anotó en la Escuela Nacional de Bellas Artes Manuel Belgrano, donde hice tres años de ciclo básico y cuatro de magisterio. De ahí en adelante tuve unos años de Publicidad que me ayudó más para descubrir que podía ser actor que para ser Licenciado. A partir de ese momento empecé a dedicarme a la actuación, enseñar dibujo en escuelas públicas y a pintar cuadros y murales que es lo que más me llena.
Y ahora con este viaje siento que puedo explotar todo el arte que tengo dentro mío.
Sos amigo de Sergio Mercurio ¿Que nos podes contar de el?
¡Sí!¡Un gran amigo!. A Sergio lo conocí hace unos años cuando lo invité a que haga su espectáculo en Ludoviko, un bar teatro que tenía con cuatro amigos más, en Temperley [Ver “El bar de Satanás“].
Sergio [Ver nota] habla y hace arte. Sus títeres transmiten todo lo necesario para que uno salga del teatro feliz y sin más que desear. Es un tipo con mucha convicción y mucho énfasis en las cosas. Muy familiero y muy capaz de todo. Una persona de palabras justas.
¿Y como es la supervivencia con dos amigos cuando se convive en un monoambiente rodado?
A veces difícil y a veces muy llevadero. Lo bueno es que hablamos las cosas que nos pasan y al otro día borrón y cuenta nueva, todo sigue igual. Estamos consientes que somos una familia a pesar de ser amigos y que nos tenemos que bancar y querer como una familia: ¿Alaska queda lejos no? (risas).
Contanos acerca de la fiesta de despedida q hicieron
Las fiestas mejor dicho… Un mes antes de partir no nos alcanzaban los días para despedirnos de toda la gente querida, recibimos mucho amor y mucho apoyo. La fiesta fue increíble, no faltó nadie, fue muy divertida y pudimos juntar unos manguitos más para reforzar el presupuesto del viaje.
¿Como esperas que siga este viaje?
Que siga así que vamos muy bien. Aprendiendo de esta escuela que para mí es la mejor que se puede hacer: viajar. Aprender mucho de la Tierra que tanto la tenemos que cuidar y aprender a ser cada vez más una persona mejor.
Los integrantes de La Paloma van puerto a puerto vinculándose con los lugareños, ofreciendo su trabajo para poder continuar viaje: Las pinturas de Fede se mezclan con la música y cocina de Chuno y el Mudo. También puede ser cualquier otro trabajo que “pinte”.
Han avistado un OFNI. (Objeto flotador no identificado) y denuncian que “casi le sacan una foto al correcaminos”. “Tuvimos que llevar a La Paloma varias veces al veterinario, pero siempre sigue adelante”, sostiene Fede, seguro de que el norte (por Alaska) llegará a la larga.
“Esperamos que puedan llegar a ver y sentir con nosotros por lo menos una parte de éste lindo planeta y su gente. Arriba que nos vamos…a todos lados” dice el blog de La Paloma al recibirnos.
No tengan dudas de que eso sucede, hagan la prueba.