Mañana jueves por la mañana está llegando Ricardo La Volpe a la Argentina, tal cual lo acordado telefónicamente el día domingo, la idea era reunirse personalmente con Carlos Portell, definir y pulir detalles y el jueves firmar el vínculo que lo unirá a Banfield.
\nObviamente que aún no se ha firmado nada porque el Bigotón no está en el país, con lo cual no es alarmante que no lo haya hecho, al contrario, es lógico. Lo que sí es alarmante es que el lunes por la tardecita de México, la hija de La Volpe haya recibido un llamado telefónico y del otro lado de la línea se haya presentado muy cordialmente un candidato a presidente de Banfield, que tajantemente le informaba que no tenía sentido que el técnico viaje a la Argentina ya que él no estaría en sus planes para después del 3 de octubre.
\nInformado del tema, la respuesta de La Volpe fue que iba a venir igual para dirigir a Banfield y que en tal caso, el 3 de octubre se volvería a México. Si bien firmar un contrato con un técnico a 40 días de una elección se puede prestar a discusión, ésta se debe dar dentro del seno de Comisión Directiva y no debería exceder los límites de la misma, ya que el Club está dando una lamentable imagen ante el nuevo DT. ¿Qué pasaba si La Volpe decidía no venir? ¿La idea es que no contratemos técnico hasta después de las elecciones y que el equipo siga a la deriva con las consecuencias que ello acarrearía? Seguramente sea el escenario mas favorable para algunos que buscan sacar rédito político de esta situación, pero sin duda que el único perjudicado será Banfield.
\nAfortunadamente, están dadas todas las condiciones para que La Volpe sea técnico del Taladro. Según pudimos averiguar, familiares de La Volpe ya contrataron los departamentos donde se hospedarán tanto él como su ayudante de campo .
\nÉstas son señales claras de cómo terminará esta historia, pero muchachos, no antepongamos miserias personales a los intereses del Club. Hoy la prioridad es levantar esta pobre campaña que estamos sufriendo.
\nAsustando técnicos no es el camino. Pensemos en Banfield y démosle a Ricardo La Volpe el recibimiento que se merece.