Me imagino que debes estar contento por todo lo que estás viviendo.

-Sí la verdad que sí. Estoy muy contento por lo que vengo viviendo en estos últimos partidos. El otro día fui reconocido por la gente y me fui muy contento. Creo que el gol en el clásico fue determinante. Ahí se terminó de cerrar lo que se venía hablando, que me daban continuidad y no jugaba. El gol contra Lanús sirvió para mi confianza y también la de la gente.

¿Cómo viviste el hecho de ya estar vendido y tener que ganarte un lugar?.

-Fue difícil. Con Crespo no tuve continuidad, pero por suerte cuando volvió Julio me siguió poniendo y me dio mucha confianza. Me quedé tranquilo y sabía que tenía la posibilidad de jugar. Siempre me sentí bien para hacerlo.

No debe ser fácil meter la cabeza en Banfield cuando ya estabas vendido a Miami.

-Si puede ser, pero yo nunca me fui, siempre estuve acá. Se hablaron muchas cosas pero yo siempre estuve metido acá. Creo que la clave fue la inconsciencia de mi juventud, que todavía no caigo de lo que está por venir.