jueves, 20 de junio de 2019 - 00:00

Una selección que sí nos llena de orgullo

Quedaron eliminadas en primera ronda pero dejando todo. En épocas de vacas flacas para el fútbol tradicional, el de las chicas, que lucha por emerger en un ambiente tan machista, logra dar un ejemplo de coraje frente a la escasez de recursos. ¡Bravo!
No hay ninguna representante del Taladro, lo sabemos, pero la selección es la selección y no tenemos dudas que en 2023 si la habrá. Y este equipo hizo historia. Fue la tercera participación en mundiales de la categoría y por primera vez no sólo que sumaron puntos si no que por primera vez convirtieron goles. El gol de Njoya Ajara en el último minuto del triunfo de Camerún sobre Nueva Zelanda derrumbó la ilusión que había alimentado el empate heroico de Argentina contra Escocia. Sin embargo, las jugadoras saben que este es solo "el final de un comienzo", algo que no tardaron en volcar en sus redes sociales, allí donde a lo largo de los 10 días que duró para ellas la aventura en el Mundial de Francia sintieron el apoyo de los hinchas. 

Belén Potassa, una de las más experimentadas y que había sido sobreviviente de las otras dos participaciones de Argentina (2003 y 2007), fue una de las primeras en expresarse. A través de sus cuentas de Instagram y Twitter, se despidió de la que quizás sea su última Copa del Mundo."Muchas gracias compañeras, familia, amigos y millones de Argentinos que creyeron en cada una de estas guerreras. Jamás olvidaré el cariño que recibí y lo hermoso que fue defender la camiseta más linda. Que sea el camino para seguir creciendo. Soy una privilegiada de la vida que vivió una experiencia única y hermosa", escribió la delantera de UAI Urquiza que en Francia no tuvo minutos de juego.Como contrapunto aparece Dalila Ippolito, la más joven de las 23 con apenas 17 años y clave en la remontada al asistir a Milagros Menéndez en el primer gol argentino frente a Escocia. "Aprendí lo que realmente es la entrega, garra y actitud. Todo eso que aprendí  es el claro reflejo de lo que es y a lo que puede llegar a ser la mujer argentina. Aprendí lo que es luchar por nuestros derechos más alla de todas las adversidades", analizó la jugadora de River.

En un ambiente tan machista y discriminativo como el fútbol, es un viento de cambio que ahora sean las chicas quienes tengan posibilidades de hacer lo que les gusta, mostrarse, ganarse el lugar y por sobre todo, darnos las alegrías y el orgullo que hace años no nos dan los varones.