No
fue el mejor ni el peor partido del equipo. Se vió superado en algunos pasajes
del juego, pero siempre estuvo a tiro del empate, aunque lejos desde lo
futbolístico. Casi no creó situaciones de gol Banfield, que tuvo enfrente un
equipo duro, prolijo, con buenos jugadores y con dos delanteros complicados.
Así todo, el Canalla logró la ventaja en el complemento desde un balón
detenido. Caruso le ganó a todos y puso el definitivo 1 a 0. No hay muchos
aspectos positivos que destacar, salvo el gran partido de Mauricio Arboleda
quien tapó dos pelotas claras de gol. Civelli ganó y perdió contra Zampedri, el
volante Cecchini estuvo bien contenido y no tuvo un buen partido y arriba, ni
Torres ni Carranza, lograron gravitar. Esa fue la columna vertebral de un
Banfield que deberá mejorar pensando en el futuro cercano.
Ahora
la cabeza deberá estar puesta en corregir errores, pero sobre todo en recuperar
a los lesionados, Enzo Kalinski, Nicolás Bertolo y Darío Cvitanich, tres piezas
claves para el andamiaje ofensivo del equipo. Se viene Gimnasia de La Plata y
luego Defensa y Justicia, equipo que viene de empatar 2 a 2 en su visita a
Lanús.