Por el derecho de admisión de su jefe, "Miguelito" Tuñiñali, la "Banda del sur" entró 20 minutos tarde y se fue en el entretiempo. ¿Abandonaron?.

El malestar de la barrabrava de Banfield fue claro. Estuvieron sólo 25 minutos en el partido y se fueron dejando un claro en la Suarez Baja. "Si no entra Miguelito que quilombo se va a armar" gritaban en el primer tiempo, mientras el hincha común arengaba el clásico "Soooy de Banfieeeld" para tapar las quejas de "la banda".

Es que los enviados del APREVIDE observaron durante Copa Argentina como los puestos de comida y bebida dentro y fuera de la cancha eran manejados por barras de Banfield, según explicó el Diario Olé a principio de mes. En esa oportunidad, la Comisión Directiva del Club negó la concesión de los puestos a Miguel Tuñiñali, y por eso aplicaron el derecho de admisión para él, además de iniciarle una causa en el Juzgado de Instrucción n° 5 de Lomas de Zamora.

¿La hinchada? Feliz. Los hinchas que se quedaron en la Suarez Baja comandaron los cantos con canciones alegres y clásicas que alientan a Banfield y no reivindican la violencia. Si eso fuera posible siempre...